De cara a la necesaria transición hacia una sociedad neutra en carbono, el papel de las Comunidades Ciudadanas de Energía (CEC) en Europa puede ser muy relevante. Desarrollar un ecosistema técnico y empresarial para servicios energéticos integrados para los CEC es el objetivo central del proyecto NEON (Servicios energéticos integrados de próxima generación para comunidades energéticas ciudadanas).
La Unión Europea está cada vez más comprometida, a través de una serie de medidas, con el empoderamiento de los consumidores para fomentar la transición energética. Este es un elemento clave para alcanzar los objetivos climáticos establecidos por el Pacto Verde Europeo. Sin embargo, hay margen de mejora para desbloquear completamente la eficiencia energética y el potencial de flexibilidad de las comunidades de consumidores: un marco en desarrollo debe establecer soluciones viables, en aspectos contractuales y financieros.
Enfoque en la Sostenibilidad Económica de las Comunidades Energéticas
La transición energética requiere la implicación de ciudadanos, instituciones y empresas locales en proyectos energéticos llevados a cabo también por comunidades energéticas. El objetivo es asegurar que estos proyectos brinden beneficios ambientales y sociales que tengan un impacto positivo a nivel local. Al mismo tiempo, las comunidades energéticas deben mostrar una clara sostenibilidad económica.
Dentro del alcance del proyecto NEON, ItaSIF junto con sus socios del proyecto realizaron un análisis que considera los costos reales y esperados de cuatro áreas piloto en España, Francia e Italia. El análisis identifica estructuras financieras adecuadas para garantizar el prefinanciamiento de las intervenciones iniciales de eficiencia energética y el reembolso a través de fuentes de ingresos.
El resultado del estudio fue un informe público centrado en cómo atraer capital privado bajo el concepto de CEL y cómo minimizar el riesgo comercial para los actores involucrados. Este artículo señalará los principales resultados.
Asegurar la Rentabilidad de la Oferta de Servicio: Oportunidades de Financiamiento Privado
Hay una variedad de instrumentos de financiación privada disponibles para crear y apoyar comunidades energéticas y sus servicios auxiliares. En primer lugar, existen instrumentos de financiación de capital y autofinanciación. Implican otorgar derechos de propiedad a la fuente de financiamiento, dividiendo los riesgos entre el financiador y la organización que recibe los fondos. Es importante subrayar que la financiación mediante acciones no produce necesariamente beneficios.
A diferencia de la financiación de capital, los instrumentos de financiación de deuda, como el arrendamiento, el préstamo en condiciones favorables, la hipoteca para la eficiencia energética (EEM) o los bonos verdes (si se trata de una empresa o una autoridad local), no tienen un impacto directo en la estructura de propiedad de las CEL. Existen algunos inconvenientes: las comunidades energéticas en su etapa inicial pueden enfrentar dificultades para acceder a los mercados de deuda y las tasas de interés (es decir, el precio del capital) podrían percibirse como demasiado altas en relación con los servicios ofrecidos. Además, los prestamistas pueden afectar las decisiones de los CEL hacia servicios más rentables, prestando menos atención a los aspectos ambientales y sociales.
El crowdfunding es otro esquema interesante de financiación privada y se está convirtiendo en una alternativa viable a los préstamos e hipotecas clásicos en la financiación de proyectos relacionados con la energía. Se basa en el capital recaudado de muchos inversores privados (tanto particulares como empresas) a través de una plataforma de financiación colectiva en línea.
Otro esquema de financiación está representado por Energy Performance Contracting (EPC). En este innovador esquema de financiamiento en la factura para inversiones en eficiencia energética, el contratista otorga una garantía financiera por los ahorros de energía esperados en un proyecto. La retribución está íntimamente ligada al éxito de las intervenciones realizadas por el proveedor que pueden centrarse tanto en el ahorro energético del proyecto como en el uso de energías renovables.
Manejo de Riesgos en el Financiamiento de la Eficiencia Energética
Los riesgos de inversión requieren una atención especial. Es posible identificar una variedad de riesgos que podrían reducir la rentabilidad y poner en peligro la implementación exitosa de proyectos de eficiencia energética y servicios energéticos, también en el contexto de las comunidades energéticas.
Deben ser considerados por las entidades financieras y pueden clasificarse en las siguientes categorías:
- Riesgo financiero (que indica la capacidad financiera del prestatario para pagar su deuda),
- Riesgo de comportamiento (representado por los sesgos de comportamiento de los usuarios finales con respecto a cómo consumen energía),
- Mercado de energía y riesgo regulatorio (que incluye precios de energía y volatilidad de impuestos y solicitud de permisos de proyectos),
- Riesgo económico (vinculado al entorno macroeconómico del país en el que se asienta un proyecto), y
- Riesgo tecnológico (que se refiere a los aspectos técnicos de los equipos instalados y las habilidades de los trabajadores).
Hay cuatro estrategias principales de mitigación de riesgos que podrían ayudar a reducir el impacto de cada factor de riesgo o la probabilidad de ocurrencia en el proyecto.
Estos riesgos y las estrategias para minimizarlos se pueden resumir en las siguientes figuras.
El objetivo de la estrategia de reducción de riesgos es disminuir el impacto o la probabilidad de ocurrencia del riesgo mediante la planificación de medidas específicas. La estrategia de transferencia de riesgo se refiere a transferir el riesgo de una parte a otra (por ejemplo, a través de contratos de seguro). De acuerdo con el tercero (absorción de riesgos), el impacto del riesgo se considera aceptable: no se requieren acciones para reducirlo. La estrategia de evitar riesgos se puede aplicar si la probabilidad de ocurrencia del riesgo excede un umbral presente: en este caso, el proyecto debe abandonarse o sus objetivos deben cambiarse.
Un análisis más profundo de todos estos aspectos está disponible en el Entregable 2.3 del Proyecto NEON. Es el tercer entregable del WP2 «Aspectos contractuales y financieros de la integración de servicios cruzados» y un resultado de la Tarea 2.3 «Estructura financiera del servicio y distribución de riesgos comerciales».
Foro Italiano de Inversiones Sostenibles (ItaSIF)